La fibromialgia es un síndrome que se caracteriza por la presencia de dolor crónico generalizado a nivel de todo el cuerpo. Descrito por los pacientes como un dolor profundo, que puede irradiar a otras áreas y de intensidad leve a severa. Entre los síntomas asociados se encuentran los siguientes: áreas sensibles en puntos gatillo, fatiga y trastornos del sueño, principalmente. (Lampert Grassi, 2019)
La presencia de este síndrome suele generar un gran impacto en la calidad de vida de la persona que lo padece. La presencia de dolor limita el desarrollo de actividades diarias, personales, laborales y sociales, llevando incluso a afectar económicamente al individuo por los costos sanitarios, así como las incapacidades laborales. (Otón, y otros, 2023)
¿Cómo se diagnostica la Fibromialgia?
El diagnóstico de esta enfermedad es clínico. Se inicia con la anamnesis (cuestionario inicial de la sintomatología del paciente), en donde se pueden identificar algunos de los siguientes síntomas:
- Presencia de dolor percibido como intenso, que puede ser constante o intermitente
- Trastornos del sueño
- Fatiga matutina
- Trastornos cognitivos
- Migrañas o cefaleas tensionales
- Trastornos digestivos
Luego se debe de realizar una exploración física para buscar la ausencia de lesión articular, déficit neurológico, debilidad muscular, o algún indicio de enfermedad metabólica-endocrina. En caso de sospecha de la enfermedad, el médico puede apoyarse en distintos cuestionarios sobre el comportamiento de los síntomas, así como la aplicación de exámenes complementarios que le ayuden a descartar patologías similares. (Laroche, 2023)
Tratamiento de la Fibromialgia:
El tratamiento debe de ser una combinación de medidas farmacológicas y no farmacológicas, las cuales van a estar indicadas de acuerdo a la sintomatología de la persona, a su percepción del dolor y de la enfermedad; teniendo en cuenta que los objetivos terapéuticos no son la curación, sino la rehabilitación guiada por el estilo de vida del paciente.
Los estudios actuales sugieren un tratamiento multidisciplinar y personalizado, que incluya: Educación de primera línea sobre su padecimiento, Actividad física adaptada, Psicoeducación cognitivo-conductual y tratamiento farmacológico. Además, sugiere que para un tratamiento efectivo, debe de existir un compromiso activo del paciente. (Laroche, 2023)
La fisioterapia y su papel en el tratamiento:
La literatura afirma que la terapia física tiene beneficios en el dolor crónico de pacientes con fibromialgia. También sugiere que las técnicas usadas en las sesiones de fisioterapia, contribuyen a mejorar la flexibilidad muscular y de los tejidos blandos, provocando una disminución del dolor incapacitante y mejorando la funcionalidad de los pacientes.
En un estudio publicado en el 2021, se evaluó la eficacia de un programa de fisioterapia y acompañamiento psicológico durante 8 sesiones, en la percepción del dolor y calidad de vida de 33 mujeres con diagnóstico de fibromialgia. Las sesiones incluían ejercicios de calentamiento, de respiración, estiramientos y técnicas pasivas articulares, todas acompañadas de una sesión corta de psico-educación. Al concluir el programa, las participantes refirieron una mejora significativa a nivel global, logrando disminuir el impacto de la enfermedad, mejorando la salud física y psicológica, y en consecuencia, la calidad de vida. (Espallardo Uribe, Abad Mateo, & Martínez González-Moro, 2022)
Tomando en cuenta los resultados, hacemos una invitación a las personas que tienen un diagnóstico de Fibromialgia a que consideren la fisioterapia como parte primordial de su tratamiento. En nuestra clínica será un gusto recibirlos y brindarles un tratamiento dirigido y personalizado a sus necesidades.