¿Realmente tiene usted una lesión en su rodilla?
La manera en la que iniciamos este blog talvez le resulte un poco curiosa, ya que normalmente si presentamos algún tipo de dolor constante que no nos permite la práctica normal de nuestro deporte lo primero que se nos viene a la mente es “algo me lesioné”. Y eso es totalmente normal, pero me gustaría que me acompañen en este pequeño trayecto en donde vamos a meditar si, en este caso, realmente nuestra rodilla presenta alguna lesión o no.
Vamos a introducirnos primero en la anatomía para ir esclareciendo un poco la situación. Sobre la articulación de la rodilla no creo que tenga que hablar mucho, ya que nuestra compañera Montserrat, en su muy interesante blog donde habla de la lesión del ligamento cruzado anterior, explica de manera muy clara los componentes y funciones de esta articulación. Así que saltaremos directamente a la estructura que nos compete en esta ocasión, que sería la banda iliotibial.
En el año 2014 Juan Manuel Madrazo Liendo en su revisión sistemática definió la Banda Iliotibial o Cintilla Iliotibial como una estructura densa y fibrosa de tejido que se origina en las fibras del musculo tensor de la fascia lata como una continuidad del mismo y del glúteo mayor, originándose en la cresta ilíaca, espina ilíaca antero superior y capsula articular de la cadera.
Como una estructura biarticular la banda se extiende a lo largo de toda la cara lateral del fémur hasta alcanzar la rodilla insertándose en la porción distal del fémur y en la cara externa de la tibia, en una protuberancia ósea que se conoce como tubérculo de Gerdy. (Doyel C,2015) (Fullem BW,2015)
Teniendo ubicada ya la banda iliotibial podemos entender fácilmente sus funciones estabilizadoras de cadera, asistiendo a los músculos tensor de la fascia lata y glúteo medio en la abducción de esta articulación y controlando la aducción. Actúa además en la rodilla estabilizándola en sentido antero lateral y por sus interconexiones con el fémur, con el tabique lateral intermuscular y con la rótula, si tiene lugar un aumento en la aducción del fémur y en la rotación interna de la rodilla podría conducir, probablemente a una mayor tensión sobre la misma. (Suarez Varela M,2015)
Esta función trasladada a nuestro deporte, principalmente se comporta como estabilizadora de la rodilla en la fase de estancia (stance phase) de la carrera, que se refiere al periodo de tiempo en el que el pie se mantiene en contacto con la superficie evitando la elevación de la cadera y movimientos rotacionales en la articulación de la rodilla. (Fullem BW,2015)
Ya tenemos el panorama súper claro y estamos listos para adentrarnos en esta patología tan común y a la vez tan poco clara como lo es el Síndrome de la banda iliotibial.
Como dato curioso que me gustaría compartirles, el primer caso de síndrome de banda iliotibial fue descrito en el año 1975 por Renne, hoy en día existen miles de artículos que intentan definir este síndrome, aunque ninguno ha logrado probar por completo la veracidad de su definición, ya que en la actualidad vivimos en un debate sobre la causa real de esta condición.
La mayoría de las referencias definían a esta patología como una fricción excesiva entre el tercio distal de la banda iliotibial y el epicóndilo femoral lateral durante un movimiento repetitivo de flexión de la rodilla. Esto debido a un aumento de la tensión en la fascia lata.
Bastante sencillo ¿no? Una banda de tejido conectivo que por tener un aumento de tensión empieza a rozarse contra un hueso miles de veces de manera continua durante un periodo de tiempo determinado al correr, esta además de estar en un aumento de tensión, se inflama por la irritación contra el cóndilo femoral y genera dolor.
Lamentablemente para nosotros que tenemos que tener clara la situación, no resultó tan sencillo. Ya que los artículos más recientes se han encargado de debatir qué tan correcta es esta enunciación, ya que se han realizado estudios novedosos que describen de una manera totalmente distinta el comportamiento de la banda iliotibial.
Una teoría reciente indica que la causa es el pinzamiento de la banda iliotibial con el epicóndilo femoral lateral que se da en aproximadamente 20-30° de flexión de rodilla. (Aderem J. Louw QA,2015)
Y de esta manera nos cambian totalmente el panorama. Ya no es una banda que se mueve hacia adelante y hacia atrás, la cual por tensión se roza contra un hueso. Sino que es una banda de tejido que no tiene movimiento, sino que recibe fuerzas compresivas por parte de los tejidos
adyacentes. Por lo cual debemos pensar más allá de un simple aumento de tensión, sino que nos obliga a hacernos la pregunta del millón, ¿por qué se da esta compresión?
Pues si retrocedemos un poco y volvemos a leer la ubicación y función de esta banda encontraremos la respuesta a esa pregunta.
Anatómicamente mencionamos que la banda iliotibial es la continuación de los músculos tensor de la fascia lata y glúteo mayor (musculatura dominante de cadera), así que cualquier alteración en esta musculatura nos puede generar un aumento de tensión en la banda y esto puede provocar la compresión de la misma. También desde el punto de vista funcional, mencionamos que un aumento en la aducción del fémur y en la rotación interna de la rodilla podría conducir, probablemente a una mayor tensión sobre la misma.
A partir de estos enunciados podemos interpretar que la causa es totalmente mecánica, esto quiere decir que es provocada por una alteración del movimiento, es decir, algo no se mueve con libertad. Pero lo que más debería de llamar nuestra atención en este caso, son los componentes que provocan el aumento de tensión de la banda; hablamos de alteraciones de glúteo o excesiva aducción de cadera, también mencionamos la rotación interna de la rodilla, la cual biomecánicamente es causada por una alteración en la movilidad del tobillo o de la cadera, las cuales no le permiten a la rodilla mantener una posición lineal…
Analizando estos componentes, ¿no notan algo curioso? ¿Se dieron cuenta que de todas las posibles causas de esta patología NINGUNA está realmente ubicada en la rodilla?
Así que me gustaría que nos volvamos a realizar la pregunta con la que inició nuestro camino. En el Síndrome de la Banda Iliotibial ¿hay realmente una lesión en su rodilla? O es una alteración de la biomecánica del miembro inferior (cadera, rodilla, tobillo) cuyo resultado es un aumento de carga para la rodilla?
Lastimosamente todas estas preguntas aún continuaran sin respuesta, pero si logré plantearle a usted querido lector el deseo de investigar más al respecto de este tema tan interesante o más bien les aclaré otro posible camino en la recuperación de esta lesión, mi trabajo está realizado.
Ahora viene la pregunta que más fácil se me hizo responder de todo este blog…
¿Qué hacer si padezco el Síndrome de la Banda Iliotibial?
¡Bastante sencillo! Venir con nosotros. Aquí en nuestra clínica podemos ayudarle a solucionar este padecimiento tan común en los corredores.
Nuestro tratamiento inicia con una valoración mecánica que va desde columna, cadera, rodilla, tobillo hasta llegar al pie, donde valoramos las posibles debilidades que están causando la alteración de la movilidad. Desde liberar restricciones articulares, inhibir musculatura hiperactiva, activar, controlar y fortalecer musculatura inhibida, todo esto direccionado a la mejora de la técnica de carrera, evitando cualquier compensación de la movilidad a la hora de correr.
Además, contamos con una alta gama de aparatología, como el láser de alta potencia, las oscilaciones profundas, la magnetoterapia y la Onda Corta que nos va a permitir mantener controlada la inflamación durante todo este proceso. Todo esto mientras damos recomendaciones de actividad física de mantenimiento para el hogar o gimnasio que se pueda realizar mientras estamos en el proceso de recuperación, ya que la inactividad total NUNCA debe ser una opción en la recuperación de ninguna lesión.
Además, programaremos progresivamente el regreso al asfalto que es donde todos quieren estar, prescribiendo la carga correcta para el momento de la recuperación en la que se encuentre el paciente.
De esta manera abarcamos la totalidad de la situación, así que, si usted es un corredor que padece esta patología y le han practicado distintos tipos de tratamientos sobre su rodilla que no han visto los resultados deseados, ya sabe dónde acudir, aquí en la Clínica de Fisioterapia y Rehabilitación Elisa Moreno, veremos más allá de su dolor y juntos encontraremos la solución.
Somos Fisioterapia
Dr D. V.
Bibliografía
- Madrazo Liendo, JM. Síndrome de fricción de cintilla iliotibial en triatletas: Revisión sistemática. Depósito Digital EUG i TC. 2014 Sept:09.
- Doyel C. Lesiones frecuentes en atletas profesionales. REDI-Universidad FASTA. 2015.
- Fullem BW. Overuse lower extremity injuries in sports. Clin Podiatr Med Surg. 2015 Apr;32(2):239-51.
- Suárez Varela M. Caso clínico: síndrome de la Cintilla Iliotibial. REDUCA (Enfermería, Fisioterapia y Podología), 7(2). Serie Sesiones clínicas Podológicas. 2015 7(2): 13-23.
- Aderem J, Louw QA. Biomechanical risk factors associated with iliotibial band syndrome in runners: a systematic review. BMC Musculoskelet Disord. 2015 Nov 16;16:356.